Mantiene a tu perro sano, lo que tienes que saber
Cuando decidimos ampliar nuestra familia con un perro debemos saber que ello conlleva una serie de obligaciones para garantizar la correcta salud del animal
Y esto no sólo se reduce a darle de comer y beber, sino a garantizar que nuestro nuevo amigo disponga de las mejores condiciones salubres que podamos otorgarle.
Desde visitas periódicas a un veterinario hasta un cuidado muy específico del propio perro.
Es por ello que os vamos a dejar una serie de masajes que podemos realizar para garantizar su correcta salud.
1. Orejas
Las orejas y los oídos de un perro son una parte muy importante, en especial en algunas razas propensas a padecer de problemas derivados, como los cockers o los dálmatas.
Tómate tu tiempo para realizar el masaje en esta zona y hazlo de forma cariñosa, pues suele ser una de las zonas preferidas por todos lo perros.
Esto ayudará a que se calme y que se deje acariciar fácilmente. Has de saber que en caso de que notes una reacción adversa, el masaje debe finalizar inmediatamente o será contraproducente.
2. Cabeza
La zona de la cabeza tiene una fuerte relación con el aparato digestivo, especialmente en las zonas cercanas a las cuencas oculares.
Si la mascota está suficientemente relajada puedes pasar a masajear el cráneo de forma suave. Ten en cuenta que no se trata de una zona con amplios músculos, por lo que podrás realizar movimientos suaves sin mucha presión y repetitivos.
Trata de alcanzar todos los puntos de la cabeza, no te quedes sólo en una zona concreta, como la nuca y ten especial precaución con las zonas blandas del cuello.
3. Espalda
La zona del lomo es muy amplia y suele ser la zona que más acariciamos, pero no por ello debemos dejar de tener cuidado.
En especial con razas como los pastores alemanes, que tienen esa zona muy frágil.
Debemos realizar un masaje cuidadoso, procurando no aplicar presión en la zona de las vértebras y usando para ello las yemas de los dedos.
Esto puede ayudar a disminuir la hiperactividad del animal y haciendo que se acostumbre al contacto humano.
4. Abdomen
Otra de las zonas que aman los perros es el abdomen, pues suele significar una mezcla entre juego, sumisión y muestra de confianza para ellos.
Por ello lo colocamos en el medio del masaje, ayudándole a mantener la concentración suficiente como para querer seguir en el juego de las caricias.
También tienes que tener en cuenta que un masaje correcto en esta zona puede ayudar a tu perro si éste sufre de problemas de gases, como en el caso de los bulldogs. Detente el tiempo necesario para garantizar que se encuentra cómodo.
5. Patas delanteras
Cuando jugamos con un perro no solemos prestar atención a lo que los humanos hacemos antes de realizar una sesión de deporte.
El calentamiento también es imprescindible para un animal si queremos que éste no sufra lesiones derivadas de un ejercicio excesivo.
Es por ello buena idea hacer un masaje de piernas antes de realizar un juego continuado. Esto garantiza que no va a sufrir de artritis y de que sus músculos van a prepararse para darlo todo contigo.
6. Pecho
La parte frontal de tu mascota es igualmente importante a la hora de realizar un masaje correcto.
Debemos tener en cuenta que es una zona ligada a la circulación, debido a la cercanía con el corazón.
Es por ello de vital importancia realizar unos movimientos que hagan que se estimule el movimiento del órgano. Con ello garantizamos una correcta tensión arterial y oxigenación de todo el cuerpo.
Recuerda no aplicar demasiada presión en esta zona, pues se trata de una región delicada.
7. Pies
De entre las zonas más delicadas del masaje nos encontramos con la zona plantar, equivalente a nuestras manos y pies.
Al masajear esta zona ayudamos a establecer un fuerte vínculo con nuestro perro.
Debemos tener cuidado especialmente al realizar los movimientos circulares, pues les podríamos quebrar algún hueso o músculo.
Siempre hay que recordar que con los movimientos se procura realizar un movimiento natural, algo que el animal podría desarrollar de forma normal.
No busques realizar movimiento en direcciones antinaturales o podrías provocarle una lesión.
8. Patas traseras
Las patas traseras también conforman una zona a tener en cuenta a la hora de realizar un fuerte ejercicio, pues son las que dotan del empuje y la fuerza a la hora de correr, por lo que son las que más trabajo van a realizar.
Procura tener especial cuidado con la zona inguinal y, dentro de lo posible, procura no realizar movimientos forzados.
Recuerda que los masajes se deben realizar siguiendo un movimiento continuo, siguiendo una dirección y sin necesidad de tener que volver al punto anterior de nuevo.
9. Cuerpo entero
Para finalizar el ejercicio de relajación procederemos a un masaje completo en todo el cuerpo en general. Con esto conseguiremos que la mascota se reactive y vuelva de nuevo a un estado normal.
Esta fase es muy importante, ya que será tomada por el perro como una sesión de juego pero para nosotros será una oportunidad para realizar los últimos estiramientos que necesitamos para garantizar una correcta finalización del ejercicio.
Procura no escatimar en el tiempo que dedicas a tu amigo, pues seguro que él no pararía nunca.
Fuente: Pixabay